Existe en Venezuela la historia de dos huérfanos, nacidos en algún momento entre 1940 y 1970. Juntos vivieron en ocasiones, también lo hicieron por separado. A veces en las calles y con frecuencia acogidos entre familias venezolanas. Algunas de ellas con dinero, otras sin un centavo. Éstos nómadas crecieron en Venezuela y decidieron juntar sus destinos para nunca más separarse, sembraron raíces en este suelo e intentaron procrear por mucho tiempo, sin éxito. En 1998, y luego de muchos intentos, logra nacer en Venezuela el hijo de Resentimiento y Ambición. Decidieron llamarlo Socialismo. Dado que nacía en la víspera de una nueva era - el siglo XXI, la era del futuro -, era mucho lo que se esperaba de él. Sin embargo, como el fruto que nunca cae muy lejos de su árbol, este siguió el ejemplo de sus padres.
Sociedad, nacida también en Venezuela años antes que Socialismo en un entorno de grandes riquezas y costumbres refinadas, conmovida por la llegada del retoño decidió acoger a los tres nómadas, pensando en el ejemplo que habían dado sus propios padres Humanidad y Civismo, recordando una frase que con frecuencia repetían: "Hagan bien sin mirar a quien..." y eso hizo.
Aunque Sociedad estuvo emocionalmente ligada a Capitalismo en el pasado, al crecer su interés por la adopción de Socialismo sabía que debía dejarlo para dedicarse a esta nueva etapa de su vida. Necesitaba un descanso de la dura cotidianidad que Capitalismo le brindaba, producto de esa vida que con altibajos habían transitado juntos durante más de 50 años.
Sociedad ofreció a Socialismo, Resentimiento y Ambición un espacio de residencia, sin exigir nada a cambio más que respeto, trabajo y responsabilidad para poder llevar el orden en el recinto según los principios de Humanidad y Civismo. Sin embargo, apoyado en los valores de sus padres, Socialismo sólo hacía cuenta de los vicios de Sociedad y la culpaba por la injusticia de ser acreedora de una gran fortuna sin merecerla.
Durante este período de convivencia, Ambición y Resentimiento dieron vida a Nacionalismo y Xenofobia, quienes junto a su hermano Socialismo, y bajo la orgullosa tutela de sus padres decidieron, al corto tiempo de nacidos, adueñarse del patrimonio de Sociedad. Así, Sociedad fue desmejorando su calidad de vida, conociendo y adoptando los mismos anti-valores que sus agresores y abandonando las costumbres, modales y valores que le fueron inculcados por Humanidad y Civismo al mismo tiempo que los hijos de Resentimiento y Ambición fueron mejorando su modo de vida, adquiriendo gustos más refinados y disfrutando de las riquezas arrebatadas a Sociedad, siguiendo las directrices de sus padres.
Sociedad, dada la ausencia de sus padres, y hundida en la más profunda depresión, fue entonces abordada por Resentimiento y Ambición, quienes, orgullosos y desprendidos de sus hijos naturales, que habían logrado llegar al éxito bajo su tutela, ahora se convertirían en consejeros de Sociedad, para que esta lograra también el éxito siguiendo su misma fórmula. Y Sociedad, atenta a las nuevas enseñanzas fue renaciendo en una nueva forma de existencia. Desde una perspectiva que la ayudaría a afrontar la nueva realidad de su vida.
De esta manera, Ambición y Resentimiento, lograron surgir, apoderarse y cambiar a Sociedad, estableciendo a Venezuela como lugar de residencia y sus hijos naturales como dueños del recinto, mientras Sociedad, como la Cenicienta, fue subyugada a la esclavitud de sus terribles visitantes.
Esta historia ¿Continuará?
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D.
